La atención fue genial, el ambiente del restaurante muy acogedor con la chimenea. y el desayuno perfecto. Las piscinas naturales son ideales para relajarse sin aglomeraciones. Sin duda, un lugar muy bonito para desconectar.

Me gustó todo.

Un lugar encantador para desconectar

La atención del personal fue excepcional, siempre dispuestos a ayudar. La piscina al aire libre fue un verdadero alivio después de un día de excursiones. Recomiendo probar la barbacoa, ¡es deliciosa! Aunque necesita mejoras en las habitaciones, el ambiente lo compensa.

Habitaciones limpias y cómodas, desayuno abundante. Solo el Wi-Fi en áreas públicas es lento.

Sin rodeos, aquí va mi opinión

Disfruté de una estancia muy agradable. El personal fue amable y las habitaciones, amplias y limpias. La decoración rústica tiene un encanto especial y la comida fue deliciosa. Este lugar es ideal para desconectar en un entorno bonito. ¡Las pizzas caseras son un imperdible! Definitivamente regresaré.

Este lugar me queda perfecto, tiene todo lo que necesito, wi-fi gratuito, restaurante, piscina al aire libre y aire acondicionado. Recuerdo que en mi primera estancia, el personal me ayudó a imprimir unos documentos. ¡Volveré por un par de días!

La comida del restaurante estuvo deliciosa, especialmente la pizza. Las piscinas naturales justo al lado fueron un gran plus para relajarse. Si bien había algunos escalones difíciles, el ambiente acogedor hace que valga la pena.

El hostal-restaurante Barbacedo en Mijares me sorprendió gratamente. La habitación era espaciosa y limpia, y la cama muy cómoda. Me encantó también el ambiente rústico del lugar, que te hace sentir como en casa. La comida, especialmente las pizzas caseras, fue deliciosa. Sin embargo, tuvimos un inconveniente con el check-in. tardamos un poco en ser atendidos. Además, las persianas de la habitación no funcionaban bien, lo que me impidió dormir más tarde. Finalmente, aunque el lugar tiene su encanto, algunas instalaciones se sienten un poco antiguas y podrían mejorar.

La habitación tenía un sofá con mesita.

mi estancia fue increíble. la habitación grande y cómoda sobrepasó mis expectativas, especialmente después de disfrutar la decoración rústica. además, la comida, en especial las pizzas caseras, fue deliciosa.

no había señal de tv.

Las instalaciones son viejas, pero el entorno es muy bonito.

El hotel tiene un bar y restaurante, lo que es práctico si no quieres salir para las comidas. Las piscinas naturales están cercanas y son una buena opción para relajarte sin mucha gente a tu alrededor.

El baño es excesivamente pequeño. al abrir la puerta choca con el lavabo y solo se abre a la mitad. También, la falta de ascensor puede ser incómoda, especialmente para personas con movilidad reducida, ya que las escaleras son bastante estrechas. Además, los colchones son viejos y duros, y si mides más de 1,80 m, puede que termines con los pies colgando. Además, durante la Semana Santa, salir del restaurante está lleno de voces y puede ser molesto.

Lugar hermoso, atención de primera. Habitación cómoda y amplia, ideal para desconectar. La comida riquísima, especialmente la pizza. El entorno es espectacular, perfecto para dar una vuelta y disfrutar de la naturaleza.

El lugar es encantador, especialmente el trato del personal, que es muy amable y te hace sentir como en casa. La habitación era amplia y limpia, con un sofá muy cómodo para relajarse. Sin embargo, la piscina no tenía suficiente espacio para todos y el acceso podría mejorarse, ya que se hacía un poco complicado. En cuanto a la comida, la barbacoa era deliciosa, pero el menú del restaurante podría ofrecer más opciones para aquellos que buscan variedad. En general, una experiencia agradable a pesar de algunos detalles que podrían ajustarse.